Contexto
Colombia se encuentra frente a un gran desafío, pues el Estado y la sociedad deben implementar el Acuerdo de Paz que el Gobierno y el grupo guerrillero de izquierda Fuerzas Armadas Revolucionarias de Colombia-Ejército del Pueblo (FARC-EP) firmaron en 2016. Tras un conflicto armado que duró cerca de 50 años, se logró la firma del Acuerdo, la cual contó con el apoyo de mediadores internacionales. El Acuerdo de Paz, que había sido rechazado en un plebiscito, fue aprobado en un segundo intento y con escasa mayoría por el Congreso, después de haber sido sometido a modificaciones.
El Acuerdo de Paz engloba cinco áreas:
- Reforma rural integral
- Fomento de la participación política de la ciudadanía y la sociedad civil
- Cese al fuego y de hostilidades y dejación de armas por parte de los rebeldes
- Solución al problema de la producción de drogas ilícitas
- Reparación a las víctimas
En general, los ciudadanos y las ciudadanas tienen poca confianza en el Estado y en el Gobierno. También se ve con recelo la poca firmeza que hasta ahora ha mostrado la implementación del Acuerdo de Paz. A ello se suma la gran desigualdad social que impera en el país, y que la violencia es todavía generalizada. No todos los exguerrilleros y exguerrilleras de las FARC se han acogido a la dejación de armas acordada y muchos de ellos se han incorporado a bandas criminales. También los grupos paramilitares existentes ejercen violencia en muchas zonas del país, y aún no ha sido posible llegar a un acuerdo de paz con el grupo guerrillero ELN.
Para que la población pueda hacerse cargo del potencial que el Acuerdo de Paz supone para el proceso de paz y reconciliación, es necesario, entre otras cosas, que los cambios positivos sean perceptibles. Hasta ahora, las personas disponen de pocas oportunidades para participar con sus propias ideas y proyectos en la implementación de los cinco puntos del Acuerdo de Paz. Al mismo tiempo, la capacidad de la sociedad civil para sus propios proyectos es limitada, también desde el punto de vista económico.
Objetivo
Mediante el fomento de proyectos de la sociedad civil, el Fondo Vivir la Paz contribuye a que el Acuerdo de Paz sea tangible para la población.