Situación de partida
Con sus contribuciones determinadas a nivel nacional (Nationally Determined Contributions, NDC), Chile se ha comprometido a reducir sus emisiones de CO2 entre un 30 % y un 45 % hasta 2030 en comparación con 2016.
El transporte desempeña un papel clave en la consecución de este objetivo: en los últimos diez años, las emisiones del transporte en Chile han aumentado alrededor de un 20 %, hasta alcanzar casi el 30 % de las emisiones totales del país. Gran parte de este aumento se debe al transporte terrestre, especialmente los camiones y buses.
El Gobierno chileno está implementando la estrategia de electromovilidad desde 2017. Quiere sustituir hasta 2050 todos los taxis y colectivos y el 58 % de los vehículos privados, así como, hasta 2040, todos los autobuses de transporte público urbano. Sin embargo, solo podrá lograrlo con un mayor involucramiento del sector privado, ya que casi todas las empresas de autobuses son de propiedad privada.
Objetivo
Las condiciones para ampliar la electromovilidad y reducir así las emisiones del transporte han mejorado en Chile y a escala internacional.